Hacía mucho que no escribía y hoy, me apetece. Tampoco es que no me apetezca el resto de días, pero el estrés y el cansancio no son buenos compañeros de la escritura, que se lo digan a algún periodista cabreado con el mundo de columna diaria.
La verdad es que estoy en el curro y es el primer día que tengo medio libre desde hace bastante tiempo y me he dispuesto a ello. Estos días han sido un estrés, para una persona como yo que necesita su espacio, su tiempo, su tumbarse en el sofá a ver una serie de terror o una de risa de 20 minutillos. No necesito más. Entre semana no me hace falta más, lo sé, soy un simple, los hombres somos así de fáciles. Además se me junta con que los findes y algunos juernes(de modo más light) aprovecho para ver a la gente más variopinta que hay por mi mundo, lo cual me mola y me da vida. Pero claro el dormir cuenta un pelín en esta vida.
Así que, me he puesto mi musiquita del iPod y a escribir que tenía noviembre en blanco. Muchas veces he dicho por aquí que mi trabajo no me gusta y sigue siendo así. Ni me llena, ni me gusta. No sé si esto lo escribo yo o los dos vasos de cerveza y uno de lambrusco que me he tomado en mi curro(los cumples se celebran así en mi curro, son buena gente), pero sé que yo no nací para esto.
Para lo que nací tampoco lo sé a ciencia cierta, pero se que algún día lo encontraré y me pondré a tope con ello y posiblemente seré el mejor de ese campo. Y cumplir uno de mis sueños, mejor dicho, varios: poder no madrugar; levantarte y saber que haces lo que quieres mientras otros trabajan; poder decir la semana que viene me voy de vacaciones con mi chica (por cierto, dentro de poco abriré un buzón de sugerencias para saber como será mi chica perfecta, lista tipo de las cosas que le tienen que gustar a la pareja perfecta de Ted Mosby) a una isla o a mi isla. Eso sería la leche.
Me encuentro genial, la versión 3.0 funciona a la perfección, algunos días escuchando cierta música por la tarde-noche me da por imaginarme en la playa tomando el sol con mi chica perfecta al lado. La cual de momento solo es una sombra negra. Pero bueno, es la sensación de estar allí y no la de saber quien será.
Bueno os voy dejando señores mundanos, que llevo aquí un buen rato y me tengo que ir...me tengo que ir a comer a casa claro.
P.D.: una vida en la que te guardas los sentimientos no es nada aconsejable
Nos leemos pronto!!
